viernes, 2 de diciembre de 2011

A la mujer

Guadalajara, Jalisco.  (Hotel)

Hay mujeres que congelan.
Amigos, les confieso que soy un apasionado observador de las mujeres.  Llevo más de 20 años analizándolas, descifrándolas, discutiéndoles y aceptándolas.
Desde mi madre, pasando por mi Nana, leyendo a Dresser, escuchando a Libertad o comiendo palomitas en el cine con la futura (algún día) mamá de mis hijos, siempre hay algo que me asombra de ellas.
Nunca acabo de conocerlas. Les he escrito canciones, nos hemos peleado, nos hemos besado, hemos volado, nos hemos conectado. 
Me llena de felicidad saber que tengo una facilidad regalada del cielo para entablar ricas y entretenidas conversasiones con las mujeres. 
Trato de aprender de su fuerza, ternura, e intuición. Yo les regalo mis oídos para que se suelten con lo que quieran. ¿Sabían que por día las mujeres necesitan sacar más palabras que los hombres?
Las quiero y las admiro mucho, (bueno a las mensas no, pero aquí ya no están, ya me dejaron de leer y se se fueron al facebook.  A ustedes sí).
Como dijo Germán Dehesa una vez: “Con orgullo puedo afirmar que mis mejores amigos son mujeres”. 
Pero no todo es color de rosa.
Las damas tienen un carácter que nuestras tuercas masculinas no están capacitadas para entender. Tienen un vocabulario que a veces no nos cuadra.
A todos los hombres que conozco su mujer les ha aplicado el siguiente diálogo: 
–¿Qué te pasa?
–Nada…
–¿Que qué te pasa? –vuelve a preguntar el desesperado hombre.
–Que nada –Y en ese instante la mujer en cuestión suelta la lagrimilla.
Señoras y señoritas no somos magos así que tengan paciencia para que podamos adivinar lo que queramos que digan.
Y qué decir de las mújeres decididas. No hay poder sobrehumano que las pare cuando se les mete algo a la cabeza. Siglos de represión nos están pasando la factura. Yo no sé ustedes pero a las mujeres que han rodeado mi vida no les sacas una idea de la cabeza ni con tortura rusa.
Ahí la importancia creo yo es la balanza y la negociación. Para el éxito en toda relación hombre-mujer debe forzosamente existir un equilibrio; ni muy muy, ni tan tan.
Van mis nachotips de esta semana:
A las mujeres: Si no nos pican, no nos pescan.. No dejes que los hombres tengamos todo el poder en cualquier tipo de relación, nos vamos a terminar aburriendo.
A los hombres: No tratemos de entenderlas y apeguémonos a la famosa frase la canción de Martín Urieta "No queda otro camino que adorarlas". 
 
Yo soy viernes
Y, ¿tú?
¿Tienes el valor o te bailo?
PS. Hoy cumplen años 3 familiares míos.  Sanchez, Cesareo, Christine. Los Quiero...